Presentado en sociedad el primer coche eléctrico de la nueva marca EQ de Mercedes-Benz, un SUV eléctrico que pretende rivalizar contra los Audio e-tron, Tesla Model X, BMW iX3 y Jaguar I-Pace.

Desarrollado sobre la base del GLC, Mercedes se adentra con este modelo de lleno en el mundo eléctrico, base del futuro del automóvil, en este caso, la marca germana apuesta por uno motor en cada eje de la rueda, con una potencia combinada de 300 kW. Estos datos arrojan una potencia de 408 caballos, y unas cifras de aceleración dignas de cualquier deportivo. El motor delantero se ocupa de maximizar la eficiencia energética, su principal función es trabajar a ritmos tranquilos o situaciones cotidianas donde no se necesite una gran exigencia. Por su parte, el motor trasero actúa cuando se necesita rendimiento extra, ofreciendo la potencia necesaria para subir las prestaciones.
«El EQC para el crono de 0-100, en tan solo 5,1 segundos»
Su imagen se ha adaptado a los nuevos tiempos, pero en esencia sigue siendo un Mercedes, la verdad es que pasa desapercibido, y en ningún momento podría dar la sensación de que estamos ante el típico modelo eléctrico, no tanto por lo que lleva debajo del capó, que cambia por completo respecto a la versión de combustión del GLC. El EQC tiene tracción integral 4Matic. El par instantáneo es de 760 Nm. Recordad que hablamos de un SUV con 2,5 toneladas de peso.

¿Y cómo afecta todo esto a su confort? pues bien, la habitabilidad interior no se ve afectada en ningún momento. Estamos ante unas plazas traseras muy amplias, todo ello debido a que las baterías se encuentran bajo el piso del vehículo, esto ayuda a bajar el centro de gravedad y conseguir estabilidad en marcha. Si tenemos que poner algún pero, es a su túnel central, algo voluminoso, debido al árbol de transmisión del sistema 4×4.

Ya en carretera, el coche germano enseña sus cartas. Aún siendo pesado, muestra una gran agilidad, como ya hemos comentado, la posición de las baterías ayuda, pero el trabajo realizado en la suspensión ha sido sobresaliente. Como cualquier SUV grande y voluminoso, notaremos el típico balanceo. Mercedes también ofrece varios niveles de retención en frenadas configurables en las levas tras el volante, con la idea de que con solo utilizar el pedal del acelerador, podamos conducir sin la necesidad de usar el freno. Ya sabemos que cuando nos subimos a un eléctrico, nuestra manera de conducir debe adaptarse.

Por último hablaremos de consumos, ¿en qué punto se sitúa este nuevo modelo? Pues bien según el ciclo combinado WLTP, promete una autonomía teórica entre 374 y 416 km, dependiendo de la configuración del vehículo. El fuerte es la ciudad, como todo eléctrico, aunque también el tipo de terreno influye mucho, sobretodo en carretera, donde su consumo tira mas alto que el de la media con 30kWh. Su recarga, dependerá del tipo de cargador, en un punto de carga estándar, tardaremos unas 11 horas en cargarse, tiempo que se reduce a tan solo 40 minutos en un punto de carga rápida IONITY, puesta en marcha conjunta por fabricantes como Ford, Porsche, BMW y Mercedes.

Los precios del Mercedes-Benz EQC comienzan en 77.425 euros, 2.200 € menos de lo que cuesta un Jaguar I-Pace, unos 5.000 € menos que un e-tron y 10.600 € menos que un Tesla Model X. Las primeras unidades del Mercedes EQC llegarán a nuestro país a lo largo del verano.

La marca ya admite pedidos. En España, su equipamiento de serie incluye faros LED adaptativos, pilotos led traseros, cristales tintados, climatizador bi-zona e instrumentación digital con navegador, además de un amplio abanico de sistemas de seguridad y la preinstalación para acceder a la carga rápida de 110 kW en la red de IONITY.
@vpanadero Víctor Panadero es Probador y Redactor en Infoblogmotor.com